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PATRICIA CAMPOS DOMÉNECH https://prezi.com/p/edit/vni1rrq3baqp/ En este enlace os presento brevemente la vida de Patricia Campos Doménech, primera mujer de la Armada Española en pilotar un reactor. Se enfrentó a muchas críticas y tuvo que soportar comentarios duros por parte de sus compañeros (hombres). Dejó su oficio porque sabía que su condición sexual le podría acarrear más problemas. Decidió dedicarse a otra de sus pasiones, ser entrenadora de fútbol. Es triste e injusto que una persona tenga que dejar su trabajo por estos motivos. Ella lo hizo para protegerse, pero muchas mujeres que están en su mismo oficio lo hacen porque sufren muchas presiones, desprecios y discriminaciones. Hay que acabar con esto esto y se puede conseguir. ¿CÓMO? os preguntaréis y la respuesta es: EDUCANDO. Educar en la igualdad, el respeto, la tolerancia y la no discriminación ni por sexo, ni por raza, ni religión, ni condición sexual. Así lo conseguiremos. "Todos somos uno".

Hoy en día es muy complicado el papel de la mujer que tiene que conciliar su vida personal, familiar y laboral. Hay una gran mayoría de ellas que son madres solteras o están separadas y tienen que lidiar a diario con este problema. Tienen que ocuparse de las tareas del hogar, de los/as hijos/as y del trabajo. Algunas se ven obligadas a reducir horas de trabajo para poder cuidar de los pequeños/as de la casa. Y, en un futuro se verán muy perjudicadas por la pensión que puedan llegar a percibir. Los hombres, por el contrario, si reducen jornada siguen cobrando mucho más que las mujeres. Por lo tanto, la diferencia de salarios sigue muy presente en nuestra sociedad. Aquellos/as que consiguen conciliar es porque cuentan con personas que les ayudan, empresas que tienen políticas de conciliación o reciben ayudas económicas del estado. Lo que está claro es que necesitamos un cambio y lo necesitamos ya. Es algo que compete a toda la sociedad. Debemos comprometernos y se puede conseguir a

LAS PROFESIONES NO TIENEN SEXO Desde edades muy tempranas los niños y niñas se ven muy influenciados por todo lo que les rodea, por su familia, por sus amigos, por la sociedad. Es importante que desde la infancia conozcan las diferentes profesiones u oficios que hay. Que no hay oficios remarcados con la etiqueta "para hombres" ni "para mujeres". Un hombre puede ser cocinero, enfermero o decidir quedarse en casa cuidando a sus hijos. Al igual que una mujer puede ser bombera, arquitecta o futbolista. Es imprescindible que las niñas y niños crezcan sabiendo que pueden ser lo que se propongan, que nadie debe discriminarlos por su sexo. Esa labor está en nuestras manos, en la sociedad, en sus familias, en la escuela, es decir, en TODOS/AS .

En el post anterior sobre el anuncio de la colonia Dolce & Gabbana , podemos observar las diferencias entre hombres y mujeres. Ellos están por encima, son dominantes y llevan el control. Sin embargo, ellas son sumisas y débiles. Un anuncio de perfumes dirigido a hombres jóvenes. Con el siguiente contra- anuncio he querido mostrar la posibilidad de ofrecer un producto para todas las edades y sin importar el sexo. No se persiguen estereotipos y se lucha por la igualdad.

Dolce & Gabbana En este anuncio vemos a varios hombres de traje y a una mujer en ropa interior tumbada en el suelo. Ellos la miran con deseo y están colocados en el plano por encima. Uno de ellos está de rodillas junto a ella y le acaricia un brazo. Vemos una vez más como en los carteles publicitarios los hombres están colocados en posición de dominio, de control, de posesión. Sin embargo, ella parece sumisa, débil y objeto de deseo. Entiendo que es un anuncio sexista en el que la imagen del hombre queda por encima de la mujer. No se observa igualdad entre ambos, ni en la vestimenta, ni en la posición de los cuerpos. Va dirigido a hombres, entre 20 y 35 años, y pide que aquel compre esta colonia podrá tener a sus pies a la mujer que se le antoje.  Pienso que no es necesario jugar con el físico de las personas para vender más productos. Si cambiáramos el rol de ambos sexos en este anuncio y lo planteásemos de una forma menos sexista, ganarían mucho más. Lo único

Brave (Indomable) del año 2012. Dirigida por Mark Andrews, Brenda Chapman y Steve Purcell. Merida es una hábil arquera que decide romper con una antigua costumbre sagrada para los señores de la tierra. Sus acciones desencadenan el caos y la furia en el reino. La joven tiene un estilo desenfadado y un dominio con el arco. No es la típica princesa de los cuentos. Ella no se enamora de un príncipe, ni necesita un héroe que la rescate. Es una joven independiente y lucha por defender sus ideales. Esta película es una historia diferente, de rebeldía en la que la joven lucha por ser siempre ella misma. Destaca la importancia del amor y la familia.

El anuncio de Vitalinea va dirigido a mujeres jóvenes. Ofrecen yogures de chocolate con 0,8 % de materia grasa. El estereotipo que se ve reflejado en el anuncio es de mujeres guapas, con buen cuerpo, que son felices comiendo ese yogur. Además, nos recuerdan que no tiene casi materia grasa. Por lo que nos transmiten un claro mensaje: TRANQUILA COME CHOCOLATE QUE NO VAS A ENGORDAR. Sin embargo, en letras pequeñas te recomiendan hacer ejercicio físico. En este anuncio se representa a la mujer, una vez más, como objeto sexual y de deseo. Ponen imágenes de labios jugosos, bocas abriéndose y chupando la cuchara. En conclusión, en los anuncios publicitarios se usa el físico de la mujer para vender. No es necesario que vayan con poca ropa, ajustadas, ni que muestren zonas del cuerpo para vender un producto. Y, mucho menos, que les recuerden que para ser felices pueden comer estos yogures de chocolate porque no van a engordar.

En un lejano y profundo bosque vivían tres cerditos que eran hermanos. Vivían felices y sin preocupaciones, pero ahora tenían miedo porque les habían avisado que un malvado lobo merodeaba el bosque. Para protegerse querían construir una casa diferente cada uno. Sin embargo, se dieron cuenta que no tenían tiempo y que la mejor opción era construir una casa entre los tres. Cada uno se encargó de recoger materiales que había por el bosque. Se pusieron a trabajar y acabaron la casa en dos días. Como estaban muy satisfechos con su trabajo decidieron celebrarlo e hicieron un concierto al que invitaron a todos los animales del bosque. Reían y cantaban: " ¡El lobo no puede entrar! ¡No nos comerá!" El lobo los escuchó y se acercó para ver que sucedía. Llamó a la puerta: "¡Toc, toc, toc!" Los cerditos y sus invitados se quedaron paralizados mirando hacia la puerta. Uno de los cerditos preguntó: "¿Quién es?" El lobo dijo: "¡Ábreme la puerta!" El

En la sociedad en la que vivimos siempre se ataca al físico de las personas, independientemente de que seas niño o adulto. Los adultos lo podemos llevar bien y restar importancia, sin embargo, nos afecta. Y hay muchos adultos (hombres/mujeres) que tiene que soportar insultos a diario, a través de las redes sociales, en su trabajo, por parte de su pareja. Y, ¿ALGUIEN HACE ALGO? Por otro lado, están los niños/as que sufren insultos en la escuela o en las redes sociales. Ellos/as no están preparados para eso. Son inmaduros/as y no tienen las herramientas suficientes para solucionar ese problema. Algo que, en la mayoría de las veces, se convierte en su peor pesadilla. En esas edades es muy difícil gestionar emociones como: tristeza, frustración, miedo... ¿Quién va a parar esto? La respuesta es: NOSOTROS. Tenemos y debemos frenar estos ataques. Una buena educación desde edades tempranas, en la escuela, en casa … No podemos permitir que esto se normalice. Y debemos luchar por el respeto,

Los estereotipos han estado siempre muy presentes en nuestras vidas. Considero que afectan tanto a hombres como a mujeres, pero bien es cierto que no de igual manera. Las mujeres siempre han tenido que demostrar más que los hombres. Han sido consideradas la parte más débil y ellos los más valientes y fuertes. Por ello, es imprescindible trabajar en la escuela, en casa, valores como la igualdad, el respeto,... para poder acabar con todos los estereotipos que nos rodean a diario y conseguir así, una sociedad mejor. Además de los estereotipos que he visto en el vídeo, hay muchos más que afectan a hombres y mujeres, como los oficios, la brecha salarial, la corresponsabilidad; o a niños y niñas, a través de los juguetes o con los juegos que se hacen en el patio del colegio. Y, siendo estos últimos los que más sufren al escuchar comentarios o experimentar situaciones de rechazo. Por lo tanto, es importante abordar este problema desde edades muy tempranas a través de actividades de sensibi

EL PRÍNCIPE CENICIENTO A través de la lectura en las escuelas podemos acercar a los niños/as al concepto de coeducación, igualdad y de corresponsabilidad doméstica. Un claro ejemplo es el libro "El príncipe ceniciento", una historia muy divertida y educativa.

Hoy en día, las tareas domésticas no son solo función de las mujeres como sucedía antiguamente. Sin embargo, muchas mujeres de mi alrededor (amigas, familiares) han crecido ayudando a hacer las tareas de la casa mientras que los hombres no ayudaban porque fueron criados pensando que "Eso era cosas de mujeres". Por ello, considero que es un problema de educación. Independientemente de los tipos de familia que haya, se deberían establecer unas normas en la casa que incluyan a todos los miembros de la familia (adultos, niños/as), siendo estos últimos los más importantes, ya que aprenden imitando. Y, nosotros, como adultos, somos un ejemplo para ellos/as y tenemos la obligación de enseñarles que todos/as somos iguales y que el sexo no determina nada.

La mujer más significativa en mi vida es y siempre será mi madre. Su vida no ha sido fácil, le tocó madurar muy pronto y dejar la escuela para cuidar de sus hermanos y trabajar muy duro.  Es una mujer luchadora, cariñosa y trabajadora. Le encanta disfrutar de los suyos, de su familia y su pasión son las plantas.  Algo que siempre me ha fascinado de ella es que ante las adversidades que la vida le ha puesto en el camino, siempre ha seguido adelante, con una fuerza sobrehumana y enseñándome que la vida sigue y debemos continuar.